La evaluación es un proceso que permite conocer el estado y los alcances de ambientes de aprendizaje, identificándose tres momentos como oportunos para comprobar el grado de enseñanza-aprendizaje, la evaluación diagnostica, la evaluación formativa y evaluación sumativa, que se realizan al inicio, durante y al final del proceso de enseñanza, sirviendo también como medio de enlace entre el alumno y el docente, con lo que se reconocen las áreas de oportunidad a través de la retroalimentación, con la finalidad de procurar la mejora en la educación.
La rúbrica menciona Quesada, (2012) “Se le puede
describir como una escala múltiple. Contiene los elementos a evaluar y en cada
uno de ellos la descripción de los diferentes grados de realización”… …” Además
de estas, que por sí mismas integran una escala descriptiva, también presenta
baremos cuantitativos y/o cualitativos para valorar cada una” (pág. 9). Es así que representan una serie de criterios,
condiciones o requisitos que debe presentar una actividad de aprendizaje en
donde al asignarles puntuaciones se
logra reconocer en donde hay que reforzar el aprendizaje. Resultan útiles y permitirán
“tener presente los aspectos esenciales a la hora de diseñar un ambiente de
aprendizaje”. (Estrada, 2015).
Referencias
Torres, S., y Ortega, J. (Julio, 2003). Indicadores de calidad en las plataformas de formación virtual: una aproximación sistemática. En Etíc@net, 1. Recuperado de http://www.ugr.es/~sevimeco/revistaeticanet/Numero1/Articulos/Calidade.pdf
Estrada, E. y Boude, O. (2015). Hacia una propuesta para evaluar ambientes virtuales de aprendizaje (AVA) en Educación Superior. En Revista Academia y Virtualidad, 8(2). Recuperado de https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/5236379.pdf
Quesada, R. (2012). Evaluación del aprendizaje en la educación a distancia “en línea”. Recuperado de http://www.um.es/ead/red/M6/quesada.pdf